domingo, mayo 16, 2010

Amistad

No es que estuviera solo precisamente, pero repentinamente así me sentí. Duró poco, lo suficiente para que escribiera en un papelajo que me encontré por ahí estos versos. Salud.

¡Una cerveza!
Mi vida, mis versos,
Esta mañana postrera de abril,
Esos pájaros (el pinzón, el verdecillo,
El ruiseñor…) los únicos
Que median entre el silencio y yo,
Por una cerveza, con aceitunas,
Y largas horas de conversación
Épica (el fútbol) o prosaica (nuestra
Contingencia) con uno cualquiera
De mis amigos.

2 comentarios:

Manolo dijo...

A ver si sale lo que continua a lo que "queda es el silencio".
Si sale házmelo llegar figura!

Artemi dijo...

Me emociono, Manolo, todavía te acuerdas...